Psicólogo Trastornos Alimenticios Córdoba

Psicólogo Trastornos Alimenticios en Córdoba

Estos trastornos son cada vez más frecuentes. Por un lado, la sociedad en la que vivimos hoy en día nos presiona por mantener un peso y cuerpo ideal, a la vez que cada vez tenemos más comida a nuestro alcance. Esta dicotomía hace que las personas que no lleguen a alcanzar el cuerpo ideal impuesto por lo cánones de belleza caigan en la falsa creencia de que el excesivo control de la alimentación o el ejercicio nos lleve a controlar otras facetas de nuestras vidas, hecho que nos puede conducir a diversos problemas con uno mismo o el resto del mundo.

Este tipo de relación insana con la comida puede llegar a desarrollar diversos trastornos alimenticios (anorexia nerviosa, bulimia nerviosa, ingesta por atracón, obesidad, ingesta excesiva por ansiedad…)

Desde nuestra experiencia podemos ayudarte a construir una relación sana con la comida, así como a ofrecerte herramientas para afrontar la presión del peso y del cuerpo ideal, y, sobre todo, a cómo relacionarte con esos pensamientos que se vinculan con tu cuerpo, tu alimentación…

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Psicólogo trastorno alimenticio en Córdoba - La Brújula

¿Cuándo acudir al psicólogo por trastorno alimenticio?

Debes acudir a un psicólogo por un trastorno alimenticio cuando notas una preocupación excesiva por el peso y la forma corporal, cambios drásticos en los hábitos alimenticios como atracones o restricción extrema, y conductas alimenticias secretas o acompañadas de vergüenza y culpa.

También es importante buscar ayuda si experimentas síntomas físicos como pérdida o aumento significativo de peso, mareos, fatiga extrema o problemas digestivos, así como cambios emocionales y conductuales relacionados con la comida, como ansiedad, depresión, irritabilidad o aislamiento social.

Además, si tu preocupación por el ejercicio se vuelve compulsiva y priorizas quemar calorías por encima de otras actividades importantes, o si tus problemas alimenticios afectan tu capacidad para trabajar, estudiar, mantener relaciones o disfrutar de actividades cotidianas, es crucial buscar apoyo profesional.

Nuestro objetivo es empoderar a quienes enfrentan trastornos alimenticios para que desarrollen estrategias efectivas que les permitan manejar sus emociones y desafíos.

Beneficio de acudir al psicólogo por trastorno alimenticio Córdoba

Evaluación y diagnóstico precisos

Un psicólogo puede realizar una evaluación exhaustiva para diagnosticar con precisión el tipo de trastorno alimenticio que tienes, lo cual es crucial para desarrollar un plan de tratamiento adecuado y efectivo.

Desarrollo de un plan de tratamiento personalizado

El psicólogo trabajará contigo para crear un plan de tratamiento personalizado que aborde tus necesidades específicas. Esto puede incluir diversas terapias, como la terapia cognitivo-conductual (TCC)

Mejora en la relación con la comida

A través de la terapia, aprenderás a desarrollar una relación más saludable con la comida y tu cuerpo. Esto incluye desafiar y cambiar patrones de pensamiento negativos y comportamientos disfuncionales relacionados con la alimentación.

Estrategias de afrontamiento y manejo del estrés

Un psicólogo puede enseñarte técnicas y estrategias para manejar el estrés, la ansiedad y otras emociones que pueden estar contribuyendo a tu trastorno alimenticio.

Apoyo emocional y validación

El psicólogo proporciona un espacio seguro y sin juicios donde puedes expresar tus sentimientos y preocupaciones. Este apoyo emocional y validación son fundamentales para tu recuperación y bienestar emocional.

Prevención de recaídas:

Parte del tratamiento incluye aprender a identificar las señales de advertencia tempranas de una posible recaída y desarrollar estrategias para prevenirla.

Psicólogo sobre trastornos alimenticios Córdoba

Problemas de conducta

  • Conductas alimenticias secretas: Las personas con trastornos alimenticios a menudo comen en secreto para evitar el juicio o la preocupación de los demás. Pueden esconder alimentos, comer a solas o mentir sobre sus hábitos alimenticios. 
  • Evitación de situaciones sociales: Debido al miedo a comer en público o a ser juzgados por su apariencia, pueden evitar eventos sociales, comidas familiares y otras actividades que involucren comida. 
  • Ejercicio compulsivo: Muchas personas con trastornos alimenticios realizan ejercicio de manera excesiva y compulsiva para quemar calorías, incluso cuando están lesionadas o enfermas. 
  • Uso de purgas: Aquellos con bulimia nerviosa o trastornos alimenticios purgativos pueden recurrir a vómitos autoinducidos, laxantes, diuréticos o enemas después de comer para evitar el aumento de peso. 
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Psicóloga sobre trastornos alimenticios Córdoba

Cómo podemos ayudarte

Los psicólogos pueden ayudarte con los trastornos alimenticios a través de una evaluación completa para diagnosticar el tipo y la gravedad del trastorno, seguido de un plan de tratamiento personalizado. Utilizan terapias eficaces como la Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) para cambiar patrones de pensamiento negativos y comportamientos disfuncionales relacionados con la comida y la imagen corporal. 

Otra forma en que los psicólogos pueden ayudar es enseñándote habilidades de afrontamiento y manejo del estrés, como técnicas de relajación y mindfulness, para lidiar con emociones difíciles sin recurrir a conductas alimenticias dañinas.

Parte del tratamiento también incluye la prevención de recaídas, ayudándote a identificar señales tempranas y desarrollar estrategias para mantener tu progreso. 

Lo que dicen de Brújula Psicología

Preguntas frecuentes sobre Psicólogo trastornos alimenticios Córdoba

Los psicólogos han investigado y tratado ampliamente los trastornos alimenticios y han desarrollado una comprensión profunda de estos problemas complejos. Aquí se resumen algunas de las perspectivas y enfoques que los psicólogos tienen sobre los trastornos alimenticios:

  1. Complejidad y Multifactorialidad:

Los psicólogos reconocen que los trastornos alimenticios son problemas complejos que surgen de una combinación de factores biológicos, psicológicos y sociales. Estos factores pueden incluir la genética, la autoestima, las presiones culturales y sociales, el estrés, los traumas y las dinámicas familiares.

  1. Patrones de Pensamiento Disfuncionales:

Una parte central de la comprensión de los trastornos alimenticios es el reconocimiento de los patrones de pensamiento disfuncionales. Esto incluye pensamientos obsesivos sobre la comida, el peso y la imagen corporal, así como creencias negativas y distorsionadas sobre uno mismo.

  1. Comportamientos Compulsivos y Evitativos:

Los psicólogos identifican que los trastornos alimenticios a menudo involucran comportamientos compulsivos (como comer en exceso o purgarse) y evitativos (como la restricción alimentaria extrema). Estos comportamientos son formas de lidiar con emociones difíciles y situaciones estresantes.

  1. Importancia del Tratamiento Integral:

Los psicólogos enfatizan la necesidad de un enfoque integral y multidisciplinario para tratar los trastornos alimenticios. Esto puede incluir terapia psicológica, tratamiento médico, apoyo nutricional y, en algunos casos, medicación. La Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) es particularmente efectiva para abordar los pensamientos y comportamientos problemáticos.

  1. Rol del Apoyo Familiar y Social:

El apoyo de la familia y la comunidad es crucial para la recuperación de los trastornos alimenticios. Los psicólogos suelen involucrar a la familia en el tratamiento para mejorar la comunicación, el apoyo y las dinámicas familiares que pueden estar contribuyendo al trastorno.

  1. Prevención y Educación:

Los psicólogos también trabajan en la prevención de los trastornos alimenticios a través de la educación y la concienciación. Esto incluye enseñar a las personas a desarrollar una relación saludable con la comida y su cuerpo, y a reconocer los signos tempranos de un trastorno alimenticio.

  1. Personalización del Tratamiento:

Cada individuo es único, y los psicólogos abogan por la personalización del tratamiento para abordar las necesidades específicas de cada paciente. Esto puede incluir diferentes modalidades de terapia y estrategias adaptadas a las circunstancias particulares de la persona.

Un trastorno de alimentación es una condición de salud mental caracterizada por patrones anormales de comportamiento alimentario y una preocupación excesiva por el peso, la figura corporal y la comida. Los tipos más comunes de trastornos de alimentación incluyen la anorexia nerviosa, que implica una restricción extrema de alimentos y una percepción distorsionada del cuerpo; la bulimia nerviosa, que se caracteriza por episodios de atracones seguidos de conductas compensatorias como el vómito autoinducido; y el trastorno por atracón, que involucra episodios recurrentes de ingesta excesiva de alimentos sin comportamientos compensatorios regulares. Estos trastornos pueden tener graves consecuencias físicas y emocionales, como desnutrición, problemas cardíacos, obesidad, ansiedad y depresión.

Los trastornos de alimentación tienen causas multifactoriales, incluyendo factores genéticos, biológicos, psicológicos y sociales. El tratamiento suele ser integral y puede incluir terapia cognitivo-conductual, apoyo nutricional y, en algunos casos, medicación. La intervención temprana y el apoyo profesional son esenciales para la recuperación y el bienestar a largo plazo.

Los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) son diversos, y cada uno tiene características específicas. Aquí te detallo los principales tipos de TCA reconocidos por la comunidad médica y psicológica:

  1. Anorexia Nerviosa:
  • Características: Restricción extrema de la ingesta de alimentos, miedo intenso a ganar peso, percepción distorsionada del peso y la figura corporal.
  • Subtipos:
    • Restrictivo: Pérdida de peso a través de la dieta, ayuno o ejercicio excesivo.
    • Con atracones/purgas: Episodios de atracones seguidos de purgas (vómitos autoinducidos, uso de laxantes, etc.).
  1. Bulimia Nerviosa:
  • Características: Episodios recurrentes de atracones seguidos de comportamientos compensatorios inapropiados como el vómito autoinducido, uso de laxantes, diuréticos, ayuno o ejercicio excesivo.
  1. Trastorno por Atracón:
  • Características: Episodios recurrentes de ingesta excesiva de alimentos en un corto período, acompañados de una sensación de falta de control. No se realizan conductas compensatorias regularmente.
  1. Trastorno de la Alimentación Evitativa/Restrictiva (ARFID):
  • Características: Evitación o restricción de ciertos alimentos que no está relacionada con la preocupación por el peso o la figura corporal. Puede llevar a desnutrición, pérdida de peso significativa y deficiencias nutricionales.
  1. Pica:
  • Características: Ingestión persistente de sustancias no nutritivas y no alimentarias (por ejemplo, tierra, tiza, cabello) durante al menos un mes, que es inapropiada para la etapa de desarrollo del individuo.
  1. Trastorno de Rumiación:
  • Características: Regurgitación repetida de alimentos, que pueden ser remasticados, vuelto a tragar o escupidos, sin una condición médica que lo explique, persistiendo durante al menos un mes.
  1. Trastornos de la Conducta Alimentaria No Especificados (TANE) o Trastorno de la Conducta Alimentaria No Especificado (TCANE):
  • Características: Incluyen trastornos de la alimentación que no cumplen con los criterios estrictos de los otros TCA mencionados, pero que aún son graves y perjudiciales para la salud física y emocional.
  1. Ortorexia (no oficialmente reconocida en los manuales diagnósticos, pero cada vez más reconocida):

Características: Obsesión con comer alimentos que se consideran saludables y evitar aquellos que se perciben como no saludables. Puede llevar a la desnutrición y a la interferencia significativa con la vida diaria.